¿Conoces algún negocio de éxito que trabaje sin orden? En tu farmacia, el éxito también dependerá del orden con el que seas capaz de abordar todas las tareas. Tranquilo, para eso existen los protocolos de trabajo en farmacia.

En cualquier empresa hay que saber responder a cuatro aspectos básicos. En primer lugar hay que saber qué hay que hacer, siendo necesario, en segundo lugar, saber quién debe hacerlo. Cuándo y cómo serán los siguientes aspectos. En resumen, los protocolos de trabajo en farmacia efectivamente responden y aportan orden en el qué, quién, cuándo y cómo.

Cualquier farmacia debe tener resuelta esta situación, de manera ordenada y con tecnología que permita evaluar la evolución de las tareas, sus incidencias y la manera de resolverlas.

¿Existen protocolos de trabajo en farmacia?

Aunque existen protocolos de trabajo en farmacia estándar, como se suele decir, cada farmacia es un mundo. En consecuencia, aunque una buena herramienta de protocolos de trabajo en farmacia debe aportarte ideas, lo ideal es establecer protocolos según tus propias necesidades y el personal con el que cuentas.

Lo que sí es estándar, y será el único modo de garantizar orden y éxito, es que en todo momento tu equipo sepa lo que hay que hacer, quién debe hacerlo, cuándo y cómo. Lo más básico pero tal vez lo más importante es saber qué hay que hacer. Si estableces protocolos de trabajo en farmacia claros, cualquier persona nueva que entre a trabajar en tu farmacia se adaptará mucho más rápido y, en general, tu equipo rentabilizará su tiempo trabajando de una manera ordenada, sabiendo en todo momento lo que hay que hacer.

Definir trabajo de una farmacia

Definir bien quién debe hacerlo no es menos importante. ¿Cuántas veces algo se queda sin hacer porque cada uno creía que lo hacía otro? Para trabajar de manera correcta los protocolos de trabajo debes poder asignar tareas a personas concretas, o bien a la persona de turno que tenga determinada titulación pero no es recomendable definir qué hay que hacer y dejar en el aire quién debe hacerlo.

Una vez que has definido qué hay que hacer y quién debe hacerlo, es fundamental también definir cuándo. En caso contrario podrás encontrarte con alguien de tu equipo realizando tareas en el peor momento del día, en lugar de estar ejecutando lo que en ese momento tocaba. Por tanto, sin olvidar la flexibilidad del día a día, es necesario establecer un horario para cada tarea, que cumpliremos salvo que suceda algo que requiera una inmediata solución que, por supuesto, también deberá quedar protocolizado.

Por último, para trabajar bien los protocolos de trabajo en farmacia es fundamental trabajar con una metodología concreta que te asegure que independientemente de quién haga la tarea, siempre se hace igual. En este sentido, estaremos resolviendo la última variable del éxito de las tareas, el cómo hacer las cosas.

Respondiendo a todas estas necesidades, podrás estar seguro de que tu farmacia estará preparada para trabajar con éxito, ser atractiva para los clientes y en consecuencia, tener un negocio rentable capaz de crecer y prosperar de manera correcta. La herramienta de protocolos de trabajo en farmacia de Sisfarma te ofrece los mejores protocolos, realizados por farmacias gestionadas con éxito y con una gran experiencia en gestión de recursos humanos, preparada para ejecutar todas las tareas sin que a nadie se le olvide y, por supuesto, resolver las posibles incidencias que van surgiendo en el día a día de tu farmacias.